Llamamiento Torrijista

Discurso de Juan Carlos Navarro en el evento "Llamamiento Torrijista" en busca de la unidad del PRD.

Copartidarios:

Hoy, en este acto sencillo pero trascendental, para mí destaca la importancia que tienen cada uno de ustedes, protagonistas de las arduas tareas que nuestro partido ha desarrollado con responsabilidad en cada etapa de nuestra historia política. Sepan que su militancia inclaudicable es lo que hoy nos hace encaminarnos hacia un proceso de unificación, con el objetivo de recomponer nuestras fuerzas, reorganizar nuestro colectivo y renovar la dirigencia del PRD.

Las tareas pendientes hoy son particularmente importantes, para que el PRD, como oposición, sea el contrapeso, el balance, al gobierno del Sr. Martinelli. Es por ello que debemos enfrentar los desaciertos del actual gobierno, que ha dado claras muestras de no cumplir lo que prometió en campaña y ser solamente un gobierno, como ellos bien lo definieron, de locos. Pero además, tenemos la gran responsabilidad desde la oposición de defender los intereses de las mayorías y luchar por el bienestar de todos los panameños.

Ejemplos sobran: por un lado el Gobierno le aumenta los impuestos a los sectores productivos del país porque dizque que “ahora le toca al pueblo”, pero resulta que esos dineros se usarán en la compra de un nuevo avión presidencial por 20 millones. Nos prometieron cambios al sistema de transporte urbano, y lo único que hemos visto es un escándalo con acusaciones de corrupción que dio como resultado la renuncia de la Directora del Tránsito, entre las peleas de espacios políticos y las luchas intestinas de lo que al fin y al cabo resultó ser una alianza electorera.

Los que ayer hablaron contra la corrupción y el nepotismo, hoy justifican los nombramientos de sobrinos, hijos y hermanos de altas figuras del gobierno en los más jugosos cargos del Estado. Criticaron hasta la saciedad con razón o sin ella, las compras directas en el Estado, sin embargo, hasta la fecha han realizado en sólo 80 días que llevan en el poder, compras directas por cerca de 80 millones de dólares.

Pero mucho más grave es ver como este gobierno amenaza nuestra democracia y la institucionalidad en este país, aplicando métodos autocráticos, donde no hay consulta sino que se impone la voluntad y el querer de quienes gobiernan sin que haya diálogo o debate, porque ya nos demostraron ampliamente su vena autoritaria.

Copartidarios, es por todo esto que nuestro partido va a consolidar este proceso de unificación. Aquí todos somos conscientes que la unidad es el resultado de los grandes esfuerzos, pero que va más allá de un concepto idealista o romántico; la unidad no surge espontáneamente, ella se forja y se construye a través del intercambio de ideas, los debates y los compromisos políticos.

Sabemos que muchos compañeros y compañeras reclaman el cumplimiento de los acuerdos del Directorio celebrado el 28 de junio en Santiago. Hoy, yo estoy convencido que todos nosotros estamos conscientes de esto y haremos cumplir a la mayor brevedad estos compromisos. Vamos a cumplir con las tareas que conduzcan a la renovación y al fortalecimiento de nuestro partido. De lo contrario, todos los esfuerzos serán en vano.

La institucionalidad y la democracia necesita contrapesos: Seremos fiscalizadores de las acciones del gobierno; defenderemos como lo hemos hecho en el pasado, la seguridad jurídica y la estabilidad económica de Panamá. Tenemos que velar por los intereses de las grandes mayorías, tal como nos enseñó el general Torrijos: volver a nuestras alianzas sociales con el hombre del campo, con los obreros, con los más humildes, con los profesionales y también con la clase empresarial. A este partido no le queda otro camino a seguir que la senda que nos trazó nuestro máximo dirigente y conductor, reforzando el método torrijista de consulta y participación popular donde todos caben y nadie sobra.

Escuchen bien señores del gobierno: este es un mensaje alto y claro. El PRD está de pie. Los que creyeron que el PRD estaba acabado después del 3 de mayo, se equivocaron; quienes pensaron que jamás las fuerzas internas de nuestro partido podían deponer intereses particulares para pensar colectivamente, se equivocaron; aquellos que apostaban a que nuestro glorioso PRD, no se levantaría jamás, se equivocaron. Que les quede claro: el PRD sigue y seguirá de pie.

Señores del gobierno: no les vamos a permitir que metan sus manos en nuestro partido. Oíganme bien: saquen las manos del PRD. Este partido ni se vende, ni se rinde, ni se raja.
A mis copartidarios de todo el país, desde Chiriqui y Bocas hasta Darién, a nuestros militantes de las comarcas, a todos los perredistas y torrijistas les digo: en unidad, vamos a echar a nuestro partido adelante hacia los objetivos fundamentales que la patria nos reclama, como bien enseñó nos el general Omar Torrijos.

20 de septiembre de 2009.